domingo, 30 de octubre de 2011

Una mirada infértil.


No volveré a ser la persona que fui antes, pero por lo menos esta lucha ya no controlará mi vida.


Tú puedes describirme de esta manera: obsesiva, malhumorada, indefensa, deprimida, envidiosa, demasiado seria, desagradable, agresiva, antagónica y cínica..

Mi infertilidad me hace sentir confusa. Siempre asumí que era fértil. Durante muchos años evité el embarazo y ahora la ironía es que no puedo c ...oncebir. Espero que eso sea una dificultad breve con una solución simple como la habilidad de escoger el mejor momento para las relaciones sexuales. Me siento confusa si es que en realidad quiero estar embarazada o si quiero ser madre.

Mi infertilidad me hace sentir acelerada e impaciente. Me enteré de mi infertilidad después de mucho tiempo gastado en esfuerzos inútiles de embarazarme. De repente mi futuro llevó un retraso. Esperé a ser madre y ahora debo esperar otra vez. Espero para citas con médicos, espero para exámenes, espero para tratamientos, espero para otros tratamientos, espero que no menstrúe, espero que mi compañero no esté de viaje y espero para el embarazo. Solo tengo doce oportunidades cada año. ¿Cuántos años tendré cuando finalmente tenga a mi familia?

Mi infertilidad me hace sentir asustada. La infertilidad está llena de desconocidos y estoy asustada porque necesito respuestas definidas. Tengo miedo de mis emociones, de mi cuerpo que no es dependiente, y de mi futuro.

Mi infertilidad me hace sentir aislada y sola. Recuerdos de bebés están por todos lados. Debo ser la única aguantando esta maldición invisible. Evito a los demás porque todo me causa dolor. Nadie sabe lo horrible que es mi dolor. Aunque usualmente pienso con claridad, ahora me encuentro seducida por supersticiones y promesas. Pienso que estoy perdiendo la perspectiva. Me siento tan sola y me pregunto si podré sobrevivir.

Mi infertilidad me hace sentir culpable y avergonzada. Con frecuencia olvido que la infertilidad es un problema médico y debe tratársele así. La infertilidad destruye mi amor propio y me siento como un fracaso. Es fácil perder confianza en una misma y sentirse avergonzada.

Mi infertilidad me hace sentir enojada. Me enojo con todo y sé que una gran parte de este enojo está dirigido equivocadamente. Estoy enojada con mi cuerpo porque me ha traicionado aunque siempre lo he tratado bien. Estoy enojada con mi compañero porque no podemos sentir lo mismo y al mismo tiempo sobre la infertilidad. Yo quiero y necesito un defensor para ayudarme. Estoy enojada con mi familia porque siempre me ha resguardado y protegido de tremendo dolor. Estoy enojada con mis médicos porque parece que ellos controlan mi futuro. ¿Cómo puedo transmitirles lo importante que es para mí ser madre?

Estoy enojada con mi economía, los tratamientos de infertilidad son muy caros. Mis recursos financieros determinan el tamaño de mi familia. Finalmente, estoy enojada con todo el mundo. Todos tienen opiniones sobre mi incapacidad de llegar a ser madre. Todos tienen soluciones fáciles. Todos parecen que saben demasiado poco y hablan por demás.

Mi infertilidad me hace sentir triste y sin esperanza. La infertilidad se siente como si hubiera perdido mi futuro y nadie sabe de mi tristeza. Me siento sin esperanza; la infertilidad me roba mi energía. Nunca he llorado tanto o tan fácilmente. Estoy triste y mi infertilidad me requiere ser tan egocéntrica. Estoy tan triste que he desatendido muchas amistades porque esta lucha duele tanto y demanda tanta energía. Los amigos con niños prefieren la compañía de otras familias con niños. Estoy rodeado por bebés, mujeres embarazadas, fiestas a las que se llevan regalos para el bebé, cuentos personales de nacimientos, películas para niños, fiestas de cumpleaños y mucho más. Me siento tan triste y sin esperanza.

Todo esto no lo escribí yo, pero no puede evitar la tentación de transcribirlo, por que me veo identificada en cada una de las palabras.
Vivo la ambiguedad de amanecer cada día con la persona que elegí para acpmpañarme en la vida, pero también siento la tristeza de ver que el proyecto que planeamos juntos se va diluyendo, primero por los malos médicos, después por lo esconómico y ahora por el paso implacable del tiempo.
Sabía que después del último negativo en algún momento me tenía que alcanzar la mano de la tristeza, en este momento no tengo más opción que sentarme y curar las heridas, juntar fuerzas y volver a retomar el rumbo, pero hacia dónde, cómo.............

9 comentarios:

  1. Esto que has escrito es muy duro y triste. Entiendo que ahora necesitas tiempo para curar, tómatelo, cura, descansa y piensa hacia donde vas a caminar.
    Seguro que muy pronto encuentras la salida.
    Un beso fuerte.

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  2. Mara, es tan cierto. Yo también pasé por todo eso. Con los matices de cada una, pero tan igual a todas que es increible. No se puede decir nada, sólo que se siente todo eso, pero puede cambiar de un momento a otro y que te deseo con todo mi corazón que tu hijo llegue pronto. Un beso muy grande!

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  3. Mara: Ya había leído ese texto, no recuerdo donde. Y es tal cual, esos sentimientos y pensamientos, esa necesidad de ser comprendido pero a la vez que no se metan en cuestiones privadas y hagan comentarios desubicados, ni que "den consejos de la abuela".
    Creo que en el momento en que estemos con nuestro bebé en los brazos, todo ese dolor se va a convertir en alegría (aunque no nos olvidemos de todo lo pasado). Un beso grande!

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  4. Te entiendo perfectamente. Estoy pasando por un muy mal momento. También llevamos tiempo intentando concebir mi marido y yo, y ahora sabemos que nos va a ser muy difíl, incluso a través de una fiv. Piensa que no estás sola, que te entendemos y que juntas llegaremos al final de este viaje, tal como Pachu consiguió.
    Besotes

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  5. Fuerza amiga, nuestro sueño tiene una esperanza basada en todas las historias como la de Pachu con final felíz.
    No sabemos cuando, ni cuanto es el esfuerzo que nos falta, pero no esta todo perdido.
    Te dejo un besote enorme

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  6. Mara: me gustaría realmente decirte algo más que funcione para que te sientas mejor. No es que yo tenga la cura, no!, pero fijate que todas las que estamos en la misma situación entendemos perfectamente esas palabras tan sentidas porque nos toca a todas. Lo que es increíble es que esa experiencia tan única e intransferible de cada una, que nos parece tan dolorosa sea parte de un largo proceso luego del cual vendrá la calma y la aceptación de alternativas que nos permitirá recuperar la felicidad que creíamos perdida. Tal como lo hacen los expertos cuando describen las etapas de duelo, a uno le parece como puede ser eso, somos tan predecibles, y somos todos iguales en el fondo? y es que como humanos evidentemente respondemos aun programa, y ese mismo programa de humanos nos permitirá salir airosos en la experiencia de vivir.
    Mara me duelen las mismas cosas, se como se siente aunque estoy en una etapa mas relajada. Llevo mas de 6 años buscando, tengo 41, perdi un embarazo de 8 semanas hace casi un año, mis posibilidades son casi nulas con mis propios recursos, asi que en este momento estoy esperando donante para ovo. Y te digo que una vez que pude aceptarlo, lo abracé con real alegría y alivio.
    No se como decirte que recuperes tu autoestima, ese es un trabajo interior, tu pareja es importante en esto, lo que sí desde ya te digo que no escuches a los opinólogos. Seguramente tenes cerca (aunque a veces se cuentan con pocos dedos de una mano) a los que te escuchan con los oidos del alma. A ellos si contalos en tu confianza, porque algún dia, cuando esto haya pasado y vos estes en una posición feliz de tu vida, realizada (se que será así por balance natural) quizás te toque retribuir en las situaciones dificiles de los demás, porque a los demás tambien les pasan cosas.
    Te recomiendo que leas los apuntes de la psicóloga Luisa Barón, los buscas por google se encuentran.
    Te dejo un fuerte abrazo y mucho ánimo

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  7. Ceci qué lindo lo que escribiste, qué maduro. Comparto plenamente pero te admiro por haberlo logrado. Yo estaba en ese camino también, pero unos pasitos atrás, todavía me costaba terminar de aceptar. Es como vos decís, somos todos tan únicos y tan iguales. Besos!

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  8. Mara: todas entendemos por lo que estas pasando porque lo vivimos y sufrimos en carne propia. No hay palabras, nunca las encuentro. Solo quiero dejarte mi abrazo fuerte y decirte que encuentres tu oaz interior. Como dicen las chicas, recupera tu autoestima, mimate, que te mimen. Recuperate como persona, despues como futura mama. Pero primero como la personita que eras o que sos, porque todos cambiamos despues de pasar por estas pruebas, durisimas que nos toco enfrentar. El siguiente paso es la acpetacion, aceptalo Mara es durisimo y dificil pero la aceptacion te traera paz, la paz armonia con vos misma. Son cosas que uno va a prendiendo. Mi alma esta tan golpeada como la de cada una de nosotras, pero aprendamos a encontrar eso que perdimos. Nuestra escencia. Besotes enormes!

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  9. Mara, cada una de esas palabras me representó alguna vez, y ahora que tengo a mi peque, cada palabra leída me golpea de nuevo y me recuerda cada cosa que pasé, cómo me sentí... ni la llegada de un hijo borra todo eso que vivimos, esas heridas quedan ahí... pero como te dijeron, somos personas más allá de la maternidad. Ojalá puedas reencontrarte con eso, sé que es difícil, pero no es imposible. Un abrazo

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